El edulcorante es un aditivo alimentario que ofrece el dulzor que nos da el azúcar, pero con menor aporte de energía. Algunos son naturales, mientras que otros son sintéticos.

El empleo de estos en los últimos años ha ido en aumento, formando parte de gran variedad de comidas y bebidas.

En cuando a su clasificación se pueden agrupar en:

  • en función del valor calórico: calóricos o acalóricos
  • según su origen: natural o artificial
  • según su estructura química

Existen evidencias sobre alteraciones metabólicas inesperadas, derivadas del uso de estos compuestos.

Los edulcorantes que son absorbidos en el duodeno e íleon, no ejercen cambios importantes en la microbiota intestinal. Pero sí son destacables los que tienen una absorción incompleta en intestino delgado, ya que a sangre solo llega una parte de lo que ingerimos, de esta manera no provocarán una elevación de glucosa tan grande como lo hace el azúcar.

Pero el problema está cuando llega al intestino grueso, que será fermentado por cientos de bacterias (microbiota intestinal) y dicha fermentación excesiva causará un malestar que conlleva hinchazón, diarrea, gas, dolor, retortijones…

Consumo de edulcorantes no calóricos en enfermedades gastrointestinales

edulcorante

En diversos estudios se ha relacionado la ingestión de edulcorantes no calóricos con el aumento del riesgo de obesidad, síndromes metabólico y diabetes mellitus tipo 2.

Respecto a los estudios de los edulcorantes en la microbiota intestinal establecen que los edulcorantes que no se absorben en intestino delgado en su totalidad, pueden generar alteraciones de la microbiota modificando el equilibrio bacteriano, lo cual puede desencadenar cambios en el hábito y motilidad intestinal, generando un aumento de las manifestaciones gastrointestinales en pacientes con alguna enfermedad de este tipo.

La absorción, metabolismo y excreción de los edulcorantes no calóricos, varía dependiendo del compuesto y la cantidad del mismo.

E

Acesulfamo-K:

Se absorbe casi en su totalidad, la porción no absorbible se excreta sin metabolizarse.

E

Aspartamo:

La hidrólisis y absorción se lleva a cabo en el tracto gastrointestinal y los productos absorbibles, en mucosa intestinal son metanol, ácido aspártico y fenilalanina, los cuales tienen diferentes rutas metabólicas dependiendo de la composición.

E

Sacarina:

Se absorbe en intestino delgado de 85 a 95%, la porción no absorbible es eliminada en orina y materia fecal.

E

Stevia:

Se absorbe lentamente hacia la circulación portal y pueden ser glucuronizados a nivel hepático y transportados de nuevo a través de la bilis al intestino.

E

Ciclamato:

40% absorbido a nivel intestinal y se elimina en orina sin ser matabolizado, de la porción que no se absorbe el 30% es metabolizado por la microbiota.

Polioles y manifestaciones gastrointestinales

Para analizar los síntomas y las manifestaciones gastrointestinales que van asociadas a a la ingestión de edulcorantes no calóricos es importante diferenciar los de alto poder edulcorante de lo que se emplean para impartir volumen y textura. En estos últimos se encuentran los polioles, que son utilizados como aditivos o para conferir volumen, textura y dulzor a los alimentos.

Por ejemplo, el eritritol se absorbe sin metabolizar en el intestino delgado; sin embargo, el isomaltol se absorbe parcialmente y es altamente fermentable por la microbiota del colon. Como consecuencia de ésta fermentación se pueden dar manifestaciones como: flatulencias, distensión y malestar abdominal, diarrea, etc. Los síntomas siempre variarán dependiendo de la dosis, si es líquido o sólido, si se consume con otros alimentos y la velocidad de ingestión, entre otros.

En conclusión: es importante saber que emplear el edulcorante a veces puede ser una buena estrategia si queremos eliminar el azúcar de nuestra dieta, pero no a largo plazo, ya que nuestro paladar debe reconocer los sabores tal y como son, sin estar enmascarados en el dulzor del edulcorante, además de toda la influencia que tiene el consumo de estos en nuestro querido segundo cerebro, el intestino.

Si quieres que te ayudemos en la retirada del azúcar y/o consumo de edulcorantes en la dieta, no dudes en ponerte en contacto con nosotras.

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