Constantemente vienen pacientes a consulta que padecen hinchazón o distensión abdominal.
Esto no es algo normal y mediante un cambio en la alimentación se puede mejorar mucho conociendo qué la está provocando.
Cuando se presenta una distensión en el abdomen, puede haber un problema o patología de base causante de la misma, como puede ser:
- Intolerancias (lactosa, fructosa, sorbitol…)
- Síndrome de intestino irritable (SII) o enfermedad de Crohn
- Exceso o falta de fibra
- Gases
Por ello es importante observarse a uno mismo y distinguir bien qué síntomas aparecen y cuándo, ya que esto facilitará mucho el diagnóstico.
Por ejemplo, en consulta, tras empezar un cambio de hábitos y seguir el plan nutricional durante varias semanas, vemos como mejoran mucho las digestiones, el tránsito intestinal, etc… Pero cuando comen alimentos más procesados por ejemplo el fin de semana lo notan mucho, ya que las digestiones se hacen más pesadas y el abdomen se inflama. Esto es algo normal y que no debería preocuparnos, ya que dicha sintomatología desaparece a lo largo del día y al retomar los hábitos normales estos síntomas no aparecen.
Cuando realmente nos deben preocupar es cuando generan mucho dolor y va empeorando con el tiempo, ya que en estos casos podríamos estar hablando de SIBO (sobrecrecimiento bacteriano), lo cual requerirá de tratamiento farmacológico así como nutricional.
Pero lo más normal es que desaparezcan a las pocas horas y puedan tratarse simplemente haciendo ciertos cambios en la alimentación sin necesidad de tomar ningún fármaco.
Causas más comunes del hinchazón abdominal
Intolerancias alimentarias
En estos casos, las personas no son capaces de digerir ciertos compuestos, los cuales pasarán a ser fermentados por bacterias intestinales y dicha fermentación es la que provocará acumulación de gases y por tanto hinchazón abdominal, dolor y alteración en las deposiciones.
Gases
La acumulación de gases puede derivar en hinchazón abdominal, así como eructos y flatulencias en exceso, necesidad intensa de ir al baño y náuseas. Normalmente son causados por la ingesta de alimentos que generan mayor cantidad de gases al ser digeridos como las crucíferas, legumbres, lácteos, alimentos con gluten…
SII y enfermedad de Crohn
Ambos se consideran trastornos intestinales crónicos. De la enfermedad de Crohn se conoce que los problemas que origina son debidos a la inflamación del tracto digestivo, tales como gases, diarrea, vómitos y pérdida de peso. Sin embargo, el SII podríamos decir que es un cajón desastre a cuyo diagnóstico se llega cuando no se consigue identificar una causa concreta de los síntomas intestinales.
Exceso o falta de fibra
La fibra es esencial para un correcto tránsito intestinal, pero hay que tomarla en su justa medida, ya que cuando no consumimos suficiente fibra, esta no puede hacer su función de retener agua e hidratar las heces, por lo tanto, dificultará mucho el tránsito. Sin embargo, cuando se consume fibra en exceso, esta puede aumentar mucho el volumen de las heces generando “tapón” y dificultando también el tránsito. Generándose en ambos casos hinchazón abdominal.
¿Cómo tratar el hinchazón abdominal?
En cualquiera de los casos de los nombrado anteriormente, una pauta nutricional adaptada 100 % al problema concreto del paciente podrá eliminar por completo toda la sintomatología. Obviamente pautado por un profesional del ámbito de la nutrición.
Por tanto, si estás en esta situación, no lo normalices, tiene solución y en la Clínica Vero Training estamos deseando ayudarte.
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